Hoy critico yo: Sin City
Tras una larga espera, por fin este agosto llegó a nuestras pantallas la película Sin City de Robert Rodríguez, director de El Mariachi y Spy Kids, basada en las novelas gráficas de Frank Miller, cómic en blanco y negro con escaso texto y pocas viñetas por página, para lograr una narración fluida, muy parecida al lenguaje cinematográfico. Historias de género negro de gran violencia y sexo, un claro homenaje al manga japones, del cual Miller es un fan declarado, sirven al autor para desarrollar todas sus ideas y tics gráficos.
La película es una translación absoluta del lenguaje del cómic al lenguaje visual, una mezcla entre lo mejor de ambos mundos; se puede decir que es una transposición perfecta y literal, por no decir una gozada visual de principio a fin.
La película se basa en tres novelas gráficas y una corta, La novia vestía de rojo, con la cual se inicia la misma, que sirvió al director a la hora convencer a Miller para adaptar el mundo de Sin City, por no decir al gran elenco de actores que aparecen en la película, destacando entre todos Mickey Rourke.
Las tres historias principales, entrelazadas en el tiempo, siguiendo el ejemplo de Tarantino en Pulp Fiction, conforman un argumento sencillo, una cronología salteada, que puede llevar a confundir a más de uno.
Todos los personajes se basan en cualquier relato o película de serie negra: el matón bondadoso, el policía honrado, la chica rubia en apuros, el asesino impecable, el detective salvador, y por supuesto, todo tipo de mafiosos sin moral y políticos corruptos.
La primera historia, Ese Cobarde Bastardo, en la que aparece el personaje de Hartigan (el policía honrado) interpretado por Bruce Willis, se desarrolla ocho años atrás, para terminar al final de la película, días antes que la historia El Duro Adiós, donde aparece el personaje de Mickey Rourke, Marv (el matón bondadoso), y la tercera historia, La Gran Masacre, que ambas se desarrollan en el mismo espacio de tiempo, pero narradas de forma independiente.
Una vez puestos en materia, he de decir que Sin City es una de las mejores películas que se puede ver actualmente en los cines; entretenida, de impecable factura, que sino se toma demasiado en serio, se disfruta aún más, envolviendote en una atmósfera virtual con la que logras sentirte cómodo, e incluso apreciar a los personajes, algo que no logran muchas películas actuales, muy lineales y simples. Pero sobre todo, existe un argumento, un poco desordenado, poseedor de un principio, un desenlace y un fin, en cada una de las tres historias que forman la película, ya que ocurre algo en la película, no solo hay escenas de acción rellenas con cualquier trama sin sentido para justificarlas.
La estética kitch, los maquillajes calcados del cómic y exagerados, la usencia del color excepto en casos puntuales, y la exageración en el trato de la violencia, te transportan a un mundo no muy alejado del real, pero sí lo suficientemente imaginario para resultar atractivo.
Como ya he dicho antes, quisiera destacar el trabajo que realiza Mickey Rourke, caracterizando de manera exacta a Marv. Realiza una interpretación sublime, borda al personaje, dando la sensación de no existir mucha diferencia entre él y su alter egeo fictício.
No todo son alabanzas; la inexistencia de una banda sonora que acompañe la acción, algunos monólogos y diálogos metidos con calzador, llegan aburrir un poco, pero no desvirtúan la película.
Yo os animo a ir a verla si aún no la habéis visto, disfrutándola siendo lo que és, un divertimiento pleno muy bien realizado, aunque no sea del todo original, pero qué película lo es hoy.
La película es una translación absoluta del lenguaje del cómic al lenguaje visual, una mezcla entre lo mejor de ambos mundos; se puede decir que es una transposición perfecta y literal, por no decir una gozada visual de principio a fin.
La película se basa en tres novelas gráficas y una corta, La novia vestía de rojo, con la cual se inicia la misma, que sirvió al director a la hora convencer a Miller para adaptar el mundo de Sin City, por no decir al gran elenco de actores que aparecen en la película, destacando entre todos Mickey Rourke.
Las tres historias principales, entrelazadas en el tiempo, siguiendo el ejemplo de Tarantino en Pulp Fiction, conforman un argumento sencillo, una cronología salteada, que puede llevar a confundir a más de uno.
Todos los personajes se basan en cualquier relato o película de serie negra: el matón bondadoso, el policía honrado, la chica rubia en apuros, el asesino impecable, el detective salvador, y por supuesto, todo tipo de mafiosos sin moral y políticos corruptos.
La primera historia, Ese Cobarde Bastardo, en la que aparece el personaje de Hartigan (el policía honrado) interpretado por Bruce Willis, se desarrolla ocho años atrás, para terminar al final de la película, días antes que la historia El Duro Adiós, donde aparece el personaje de Mickey Rourke, Marv (el matón bondadoso), y la tercera historia, La Gran Masacre, que ambas se desarrollan en el mismo espacio de tiempo, pero narradas de forma independiente.
Una vez puestos en materia, he de decir que Sin City es una de las mejores películas que se puede ver actualmente en los cines; entretenida, de impecable factura, que sino se toma demasiado en serio, se disfruta aún más, envolviendote en una atmósfera virtual con la que logras sentirte cómodo, e incluso apreciar a los personajes, algo que no logran muchas películas actuales, muy lineales y simples. Pero sobre todo, existe un argumento, un poco desordenado, poseedor de un principio, un desenlace y un fin, en cada una de las tres historias que forman la película, ya que ocurre algo en la película, no solo hay escenas de acción rellenas con cualquier trama sin sentido para justificarlas.
La estética kitch, los maquillajes calcados del cómic y exagerados, la usencia del color excepto en casos puntuales, y la exageración en el trato de la violencia, te transportan a un mundo no muy alejado del real, pero sí lo suficientemente imaginario para resultar atractivo.
Como ya he dicho antes, quisiera destacar el trabajo que realiza Mickey Rourke, caracterizando de manera exacta a Marv. Realiza una interpretación sublime, borda al personaje, dando la sensación de no existir mucha diferencia entre él y su alter egeo fictício.
No todo son alabanzas; la inexistencia de una banda sonora que acompañe la acción, algunos monólogos y diálogos metidos con calzador, llegan aburrir un poco, pero no desvirtúan la película.
Yo os animo a ir a verla si aún no la habéis visto, disfrutándola siendo lo que és, un divertimiento pleno muy bien realizado, aunque no sea del todo original, pero qué película lo es hoy.
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