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viernes, noviembre 29, 2013

Hoy critico yo: La Cabaña en el Bosque


Hola niños y niñas. Hoy toca destripar un estreno retrasado hasta la saciedad, pero para su explicación mejor os dejo este enlace de Blog de Cine, ya que prefiero explayarme con una de esas películas de culto que tanto nos gusta alabar a los amantes del buen cine de terror/gore, La Cabaña en el Bosque.

The Cabin in the Woods/La Cabaña en el Bosque es el más sentido homenaje que se le puede hacer a un género cinematográfico y a una película en concreto, Evil Dead de Sam Raimi (trilogía Spiderman, Arrástrame al Infierno). Joss Whedon, gurú televisivo por Buffy Cazavampiros y Firefly, escribe junto con el director Drew Goddard (Monstruoso), una nueva revisión de una historia contada hasta la extenuación, pero dotando de un trasfondo diferente al encargado de rebanar el pescuezo a los jóvenes imprudentes que pasan la noche en una cabaña situada en un profundo bosque, resultando fresca y original.

Un grupo de amigos, deciden pasar el fin de semana en una antigua cabaña, cercana a un lago, para olvidarse un poco de la universidad y dar rienda suelta a sus hormonas. Para sorpresa de todos, alguien o algo, perturba sus vacaciones, desatando un pequeño Apocalipsis alrededor de la cabaña, ya que están siendo motorizados por una extraña agencia gubernamental, causantes últimos de sus desdichas.

Lo que empieza cómo un juego típico en este tipo de películas, con un nutrido grupo de estereotipos: el deportista, la virginal, la descarada rubia, el fumado friki y el estudiante cerebrito, se torna en un inteligente desarrollo de los acontecimientos que llevaran a los protagonistas a luchar por su vida, no solo ante un solo Slasher con machete, sino ante un destino elegido al azar (quienes hayan visto o vean la película, sabrán de qué les hablo).


Multitud de homenajes y detalles, salpican, nunca mejor dicho, todos y cada uno de los minutos que dura el metraje, dividido en dos partes muy diferenciadas; una primera, que homenajea a Evil Dead u otras películas parecidas como Cabin Fever, y una segunda parte, con un ritmo muy diferente, con mayor casquería para deleite de los amantes del gore más gamberro.

Personalmente, disfruté más con la primera parte de la película, mucho más consciente de su identidad de homenaje que la segunda parte, más original y atrevida, a la par de engañosa (viendo el trailer uno puede hacerse una idea equivocada), que da sentido a esa Cabaña abandona en medio de la nada. Ya sea por mi admiración por la original película de Sam Raimi, ejercicio sublime de efectos visuales, físicos y sonoros para crear una atmósfera agobiante y tenebrosa (algo que Fede Alvarez deja de lado en su notable remake), me costó entrar en ese juego orquestado por Whedon y Goddard.

A pesar de este contratiempo, que no lo es en absoluto, engaños de la mente, La Cabaña en el Bosque es un divertido espectáculo de terror inteligente, salpicado por ese humor tan característico que imprime Whedon en todos sus trabajos, algo más negro de lo habitual, que esconde multitud de secretos y homenajes apreciables a primera vista, cuyo desenlace no deja indiferente a nadie.

Eso si, mejor en pantalla grande que en tu televisor (o pantalla de ordenador). 

viernes, noviembre 15, 2013

3's&7's

Queens of The Stone Age 3's&7's

jueves, noviembre 07, 2013

Hoy critico yo: Thor, El Mundo Oscuro


Si hubiera que señalar la película más floja de la primera Fase de Marvel Studios, esa sería Thor de Kenneth Branagh. Aún con el buen hacer del director británico, culpable máximo de dotar a Loki (Tom Hiddleston) de una profundidad y un aire Shakespeariano sin igual (habría que aplaudir sin descanso por ello), la sensación general era unánime, sobraba el metraje del desierto de Nuevo México.

Marvel, conocedora, no solo de su basto universo, sino del gusto del público (en general), abre un poco más el abanico que nos ofrece la mitología nórdico marveliana, para mostrarnos lo que queremos ver en pantalla: Asgard y los Nueve Reinos en todo su esplendor, poblados de maravillosas y peligrosas razas que hagan, de nuevo, frente a los Asgardianos (cómo en su día vimos a los Gigantes de Hielo), ver una cruzada sin parangón de los Tres Guerreros y Lady Sif, escudando a su máximo guerrero, Thor.

En los albores del tiempo, Bor, Padre de Odín, derrotó en Svartalfheim, hogar de los Elfos Oscuros, a Malekith (Christopher Eccleston), obsesionado con devolver a la oscuridad a los Nueve Reinos gracia al Eter, materia que traería la destrucción de todo mundo conocido. Escondido el Eter en un lugar donde nadie pueda llegar a él, dado por muerto Malekith, la única amenaza actual del Reino Eterno es Loki y sus juegos de traición.

Con Alan Taylor (Los Soprano, Juego de Tronos) a los mandos de la silla de dirección, esta epopeya de aventuras, con grandes momentos de Space Opera, mezcladas con intrigas palaciegas, es la nueva oportunidad de ver a Thor (Chris Hemsworth), ya libre del peso que supone presentar al personaje y de competir en pantalla con el plantel de Vengadores, para alzarse cómo un gran héroe y futuro rey de Asgard, que sigue llorando a su amor, Jane Foster (Natalie Portman).

El mundo creado por Stan Lee y Jack Kirby, mestizaje entre el mundo medieval y elementos futuristas (magia y ciencia), resulta un buen caldo de cultivo de todo tipo de géneros, de ahí que mientras estás viendo la película, te embarga la sensación de recordar la última película de Star Trek: En la Oscuridad o que los propios Elfos Oscuros tienen posos de Klingon, además de ver cómo la estructura de la película es una revisión de El Imperio Contraataca, salvando claro está las distancias, por lo que presenta, antesala de la tercera parte de la saga y, posiblemente, Los Vengadores.

A pesar del buen entretenimiento que es esta película, con grandes batallas, esa imponente Asgard que bebe de los diseños de Kirby, del lucimiento del Doctor Erik Selvig (Stellan Skarsgård) y Darcy (Kat Dennings) en todos sus planos, Thor: El Mundo Oscuro adolece de una falta de aprovechamiento de todos los recurso puestos en pantalla, para dar más cabida a la insulsa historia de amor entre Thor y Jane (que no poseen ninguna química entre ellos), que a la lucha de poder entre Loki, Thor y Malekith.

Empezando por lo poco aprovechado que está el villano de la función, de igual modo que Cráneo Rojo en Capitán América, pareciendo el extraño Kurse mucho más amenazante que su propio líder; el papel de los Tres Guerreros útiles para hacer bulto en las batallas de la película, o Lady Sif, florero únicamente utilizado para mostrar celos del amor de Thor a Jane, son algunos de los pecados que tiene el guión, que además, nos regala los mejores momentos del metraje con las puntuales apariciones de Loki (que se lleva las mejores frases y escenas), o Heimdall (Idris Elba), catalizador de toda la rebelión contra los Elfos Oscuros.

Habría que destacar el papel de Rene Russo y Sir Anthony Hopkins, Frigga y Odín respectivamente, ya no solo por dar lustre al cartel, sino por la importancia que sus personajes tienen en el presente y en el futuro de la saga, aún cuando Hopkins presenta ya una edad y torpeza física difícilmente disimulada, pero que es capaz de asimilar en su personaje.

Thor: el Mundo Oscuro, cómo he dicho en el Twitter del Podcast de ELHDLT, posee lo mejor y lo peor de la serie Juego de Tronos y de Hora de Aventuras. Diversión y momentos hilarantes que llegan al absurdo, capaces de encajar entre si.

sábado, noviembre 02, 2013

Emborracharme

Lori Meyers Emborracharme